Una de las principales ventajas de la IA es la capacidad de personalizar la experiencia al cliente, a través de la recopilación y análisis de datos para entender mejor qué está demandando la audiencia objetivo.
Un ejemplo de este valor agregado lo demuestra la firma deportiva Nike, quien por medio de su campaña “Nike by you” brinda la opción de personalizar el calzado deportivo al comprarlo en línea, generando mayor satisfacción en sus consumidores y posicionando a la marca en temas de innovación.
La eficiencia es otro aspecto a considerar en una atención al cliente más rápida y oportuna. Esto se puede lograr por medio de la automatización de procesos y el uso de chatbots. El uso de estas herramientas tecnológicas tiene como objetivo hacer que el usuario tenga una experiencia satisfactoria. Mientras un chatbot ayuda al usuario a encontrar lo que necesita, la automatización de procesos agiliza su compra en línea o responde a las preguntas frecuentes, reduciendo los costos en la atención.
Las empresas que logren satisfacer las expectativas de sus clientes tendrán un lugar privilegiado dentro de su mercado, al potenciar la lealtad de los usuarios hacia su marca, producto o servicio.
Para hacer de la IA un proceso agradable, se deben considerar aspectos como las necesidades de los clientes, elegir la tecnología adecuada y acorde a lo que se requiere, implementar la IA gradualmente y evaluar los resultados para medir el impacto deseado.